Tiroiditis aguda supurada y Tiroiditis de Riedel

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La tiroiditis aguda supurada es una enfermedad muy rara. La etiología más frecuente es la bacteriana (estafilococos, estreptococos y enterobacterias) y con menor frecuencia la micótica. Se pueden afectar glándulas sanas, aunque es frecuente que el tiroides presente alguna patología previa.
La infección se produce por vía hematógena a partir de otro foco de infección primario, por invasión directa a través de pequeñas fístulas traqueoesofágicas, o bien por persistencia del conducto tirogloso.

El paciente refiere dolor en la región cervical anterior irradiado a la nuca y a los oídos y que aumenta con los movimientos cervicales, la deglución y la palpación. En la exploración se aprecia una zona eritematosa y fluctuante. Son habituales la fiebre, los escalofríos y las adenopatías regionales. En la analítica se objetivará leucocitosis. No suele ocasionar disfunción tirodea. El tratamiento se hará según antibiograma de la muestra cultivada tras PAAF y en ocasiones puede ser necesario el drenaje quirúrgico.

La Tiroiditis de Riedel es excepcional y de etiología incierta. Clínicamente se presenta como un bocio de crecimiento progresivo, simétrico o no, muy duro, inmóvil, que produce compresión y englobamiento de las estructuras vecinas, lo que ocasiona disnea, disfagia y disfonía. Los anticuerpos antitiroideos son negativos y en el 25% de los casos existe un hipotiroidismo. La fibrosis puede afectar también: parótida, órbitas, pulmón u otras serosas. El tratamiento es quirúrgico, con el objetivo de conseguir la descompresión de las estructuras vecinas.

Originally posted 2008-02-27 21:01:33.

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