¿Sabes cuáles son los signos que pueden avisarte de que tu organismo no contiene el suficiente nivel de hierro como para que te sientas pleno y saludable? Te contamos cuáles son los principales síntomas.
Las mujeres tienen una mayor probabilidad de que sus niveles de hierro disminuyan desde la edad fértil ya que, con cada menstruación, se produce una pérdida importante de hierro; por otra parte, también hay que tener en cuenta que durante el embarazo y la lactancia, el cuerpo femenino requiere de una doble ingesta de hierro ya que necesita hierro tanto para ella como para el bebé.
Uno de los síntomas más llamativos es el cansancio y la fatiga sin causas aparentes, es esa sensación de pérdida de energía o de que nos cuesta hacer una actividad o ejercicio que realizamos sin esfuerzo con normalidad y ahora resulta agotador.
Otro de los signos de la falta de hierro es la propia imagen del cuerpo. Cuando se produce una importante pérdida de hierro la piel se ve mucho más pálida y, también se pueden notar sus efectos en el cabello (ya que se muestra sin vida, más seco y frágil) como en las uñas que son más quebradizas.
También puede bajar la temperatura corporal, uno llega a sentir esa sensación de que está destemplado o que hay zonas del cuerpo, como las manos o los pies, que constantemente están fríos.
Dependiendo de la gravedad del nivel de anemia pueden producirse otros signos como sensación de mareo, dolores de cabeza, irritabilidad, etc.
Una de las formas más sencillas de hacer frente a las pérdidas de hierro es cuidar la alimentación. Por ejemplo, aumentar la ingesta de verduras ricas en vitamina C, consumo de carnes rojas 1 o 2 veces por semana, evitar el café y el té después de comidas ricas en hierro y la toma de complementos alimenticios ricos en hierro que pueden aportar ese plus que a veces resulta difícil obtener.
Podéis encontrar complementos alimenticios como Floradix que no contiene ni conservantes ni colorantes, es apto para vegetarianos, no contiene lactosa ni produce estreñimiento.