El tabaco es uno de los causantes del mayor número de enfermedades cardíacas y respiratorias y su represión es una buena medida, para ayudar a la sociedad en general.
Esto bien lo sabe el gobierno español, que mediante su ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, implanta una dura lucha para combatir el tabaquismo y los males entre la población.
Con la posible aprobación de una ley que impediría fumar en cualquier lugar público, como modificación de la ley en contra del tabaco del 2006, que si bien prohibía fumar en el centro laboral y lugares públicos a más de 100 metros cuadrados, con la nueva ley se daría un gran avance en la lucha contra el tabaco.
Siendo consultada la ministra expresó que un setenta por ciento de la población española estaría de acuerdo con esta ley, y sobre la consulta de que si la prohibición total, la ministra apeló a una madurez de la población y confirmó la prohibición total del tabaco en lugares públicos, de aprobarse esta ley.
Debe tenerse en cuenta que el tabaco es el segundo índice de mortalidad en todo el mundo, y que debe combatirse para poder salvar vidas.
