Un estudio británico concluye que las embarazadas que tienen sobrepeso o son obesas tienen más posibilidades de que se les practique una cesárea de urgencia debido a la obstrucción del parto.
La causa es que ellas tienen contracciones débiles.
El trabajo, publicado en la revista ‘BJOG: An International Journal of Obstetrics and Gynaecology’, se centra en la hipótesis de que la dificultad que experimentan las mujeres gruesas en la primera fase del parto (la de dilatación) se debe a una disminución de la capacidad de contracción del músculo uterino, el miometrio.
Las parturientas obesas que dan a luz de forma natural tardan más en dilatar y sufren más en la última etapa del parto.
La actividad muscular disminuye a medida que aumenta el índice de masa corporal de la mujer.
Originally posted 2007-05-10 17:00:00.